Ingredientes:
40 gotas de stevia.
215 gramos de puré de calabaza.
125 ml de aceite de oliva virgen extra.
30 ml de agua.
300 gr de hª de espelta integral.
1/2 sobre de gasificante.
1 pizca de sal
1 pizca de canela y una pizca de nuez moscada
1 cucharadita de jengibre en polvo y otra de jengibre rallado fresco.
Elaboración:
Primero hacemos el puré de calabaza, la pelamos y
cortamos en trocitos pequeños, la ponemos en una pota con agua hasta que lo
cubra y la ponemos a hervir, cuando la pinchemos y esté blandita la trituramos
y dejamos enfriar.
Por otro lado mezclamos la harina con la levadura,
la sal, las especias y también el jengibre fresco rallado.
Batimos los huevos y añadimos las gotas de stevia, el aceite,
el agua y por último añadimos el puré de calabaza y mezclamos con una espátula
hasta formar una pasta homogénea. El agua no la añadimos por ahora, ya que puede que no nos haga falta.
Por último tenemos que mezclar e incorporar ambas
preparaciones de líquidos y sólidos. Si vemos que queda muy compacta le añadimos el agua hasta que sea una masa que podamos volcar fácilmente en el molde.
Cocinar en horno pre-calentado a 180º durante unos
40 minutos.
Os recomiendo encarecidamente que lo probéis, tiene una textura impresionante!
Ya me contaréis, que aproveche!